Todavía, cuando la noche cuaje en las paredes, amaré ese instante por sí mismo, en su frialdad. A
pesar de tanto esperar sobre
el ángulo azul de las estrellas, a
pesar de tanto, no estoy curado. Tienes plumas en el mirar, en tus ojos, rielan pasiones. No conozco tu amor. Solo una
fantasía llevo como recuerdo.
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